El Tribunal Superior de Xustiza de Galicia (TSXG) ha dado un paso firme en la protección del patrimonio gallego. La Sección Tercera de la Sala de lo Contencioso-administrativo ha anulado parte del trazado de una línea de alta tensión en el municipio de Rois al considerar que afecta al Camino Portugués a Santiago y al conjunto patrimonial del Castro Lupario, además de a los pazos de Angueira de Castro y O Faramello. La sentencia responde a un recurso presentado por el propio Ayuntamiento de Rois contra la aprobación de la infraestructura por parte de la Xunta.
El tribunal considera que el impacto ambiental de la línea eléctrica no se evaluó adecuadamente en su conjunto, sino solo de manera aislada para cada uno de los elementos afectados. La Sala pone en valor la singularidad de la zona, ya que en ella confluyen dos elementos con una gran carga simbólica para el Camino de Santiago: el Castro Lupario, vinculado a la leyenda de la reina Lupa en la Traslatio del Apóstol, y el propio trazado del Camino Portugués.
Según la sentencia, ambos conforman "un mismo paisaje y son partes de una misma historia cultural, patrimonial y espiritual, sin la cual Galicia sería hoy un pueblo diferente". Además, la resolución también destaca la presencia de los pazos de Angueira de Castro y O Faramello, testigos de la evolución arquitectónica y social de Galicia.
El alto tribunal gallego subraya que el proyecto aprobado vulnera la Ley de Patrimonio Cultural de Galicia, ya que las torres de alta tensión afectan directamente a la protección del Castro Lupario y alteran su apreciación visual. Además, considera que la línea eléctrica impacta negativamente en el Camino Portugués, ya que impone una barrera visual permanente sin justificar por qué se escogió ese punto exacto para su cruce.
La sentencia también hace referencia a la Ley de Protección del Paisaje de Galicia, pues la presencia de la línea de alta tensión desvirtúa los valores culturales y paisajísticos de la zona, reconocidos en el Plan Básico Autonómico de Galicia de 2018.
En una crítica contundente a la Xunta, el TSXG pone en duda la validez del informe presentado por la Dirección Xeral de Patrimonio Cultural, ya que no se conoce quién lo elaboró ni se aporta prueba de su existencia. En contraposición, el tribunal da más peso al informe del Consello da Cultura Galega, que sí acredita la importancia del territorio como paisaje cultural e histórico.
La resolución, contra la que cabe presentar recurso de casación ante el Tribunal Supremo, marca un precedente en la protección del patrimonio gallego, situando el Camino de Santiago como un bien a preservar frente a proyectos que puedan afectar a su esencia histórica y paisajística.