El rector de la Universidade de Santiago de Compostela (USC), Antonio López, ha afirmado este miércoles que no habría “ningún problema” en modificar el convenio con el Servizo Galego de Saúde (Sergas) en caso de que la Universidade da Coruña (UDC) llegue finalmente a implantar el Grado en Medicina. El convenio actual, cuya aprobación está prevista en el consejo de gobierno de la USC, prevé la adscripción de todos los hospitales gallegos a la formación médica que imparte Santiago, lo que ha generado tensiones con la institución coruñesa.
“Mientras haya una única titulación, lo más responsable y respetuoso es que todos los centros del Sergas estén adscritos a ella”, defendió López, quien recordó que el nuevo texto simplemente actualiza el convenio vigente desde 2001, en coherencia con el acuerdo alcanzado en 2015 para descentralizar las prácticas clínicas del Grado en Medicina, aunque manteniendo una sola facultad en Galicia.
El conselleiro de Sanidade, Antonio Gómez Caamaño, también se pronunció sobre la polémica, subrayando que el nuevo concierto con la USC “no interfiere para nada” en que la UDC pueda crear su propia titulación. Según explicó, los conciertos del Sergas con las universidades públicas son bilaterales y se rigen por criterios de titulación, no de territorialidad. “Se están tramitando convenios con las tres universidades, cada una a su ritmo”, detalló.
Caamaño negó que la UDC desconociera el contenido del acuerdo: “No es cierto que no lo supiesen. Se ha tratado en el grupo de trabajo correspondiente”. También defendió la renovación del convenio con la USC por razones prácticas y legales: actualizar un documento de 2001 y dar respuesta a una realidad donde el alumnado realiza prácticas en todos los hospitales del sistema gallego.
El rector compostelano reiteró que la descentralización no implica la necesidad de crear nuevas facultades, aunque dejó la puerta abierta a un cambio si el contexto evoluciona. “Si dentro de un tiempo hay más titulaciones de Medicina, será otra situación y veremos cómo hacerlo efectivo”, apuntó. Por ahora, insistió en que la USC cuenta con profesorado propio en los hospitales para impartir esa docencia descentralizada, sin impedir que personal de otras universidades pueda colaborar.
Además, recordó que el Complexo Hospitalario Universitario de Santiago (CHUS), actualmente adscrito a la USC, también puede estar vinculado a otras universidades para otras titulaciones, como ocurre con el Grado en Fisioterapia que imparten la UDC y la Universidade de Vigo.
Caamaño, por su parte, defendió que “con una facultad descentralizada es suficiente”, y criticó los “debates localistas” que, a su juicio, no benefician al alumnado ni a la calidad formativa. “¿Qué es lo mejor para los estudiantes? Aprovechar todos los recursos del sistema sanitario gallego”, concluyó.