Aumentar los ensayos clínicos realizados y atender al paciente en su "contexto sociodemográfico" y de manera descentralizada, teniendo en cuenta la dispersión de la población de Galicia, son algunas de las principales claves que debe observar el sistema gallego de salud para abordar la medicina de precisión contra los cánceres hematológicos crónicos.
Así lo consideran el hematólogo del Hospital Clínico de Santiago Adrián Mosquera; la jefa de servicio de esta misma especialidad en el Hospital Universitario Lucus Augusti (HULA) de Lugo, Esperanza Lavilla; y el especialista en Farmacia Hospitalaria del mismo centro lucense, Jaime Gulín; al participar en un coloquio en Santiago de Compostela organizado por Europa Press y la compañía farmacéutica AstraZeneca, representada a través de su regional government affairs lead, Ana de Mora.
En esta mesa redonda en el Hotel Monumento San Francisco, los tres expertos sanitarios han abordado las enfermedades oncohematológicas crónicas y los principales retos futuros de este campo de la medicina que todavía es desconocido para buena parte de la población. Según datos de la encuesta 'Percepción sobre los Tumores Hematológicos en España', promovida por AstraZeneca, solo el 19% de los gallegos asegura saber lo que es la leucemia linfocítica crónica.
Todo ello pese a que anualmente, de acuerdo con la estimación del doctor Adrián Mosquera, se diagnostican más de 300 casos al año de esta patología en Galicia, que se corresponden con "entre el 15% y el 20% de todas las neoplasias hematológicas". Por tanto, los pacientes en la Comunidad se pueden contar por miles.
Los tres expertos sanitarios que han participado en el debate han coincidido en que el escaso grado de conocimiento de estos tumores crónicos se puede deber, en parte, a su "incidencia tan baja", tal y como ha reflexionado la doctora Esperanza Lavilla.
Esto hace que, "desde el punto de vista institucional", tanto los recursos como las campañas de cribados que promueven los servicios públicos de salud se centren en otro tipos de cánceres, principalmente en los de "órganos sólidos", ha apuntado Mosquera.
En este contexto, el hematólogo del Clínico compostelano ha relatado casos de "muchos pacientes" que se asustan cuando son diagnosticados de leucemia linfocítica crónica. Y es que la propia palabra 'leucemia' "todo el mundo la asocia a una enfermedad terrible", ha apostillado Jaime Gulín.
"EN MUCHOS CASOS ES INDOLENTE"
Sin embargo, se trata de una patología "que en muchos casos es indolente y que no va a necesitar tratamiento", sino que permite llevar una vida normal pero con una vigilancia que, una vez el paciente se estabiliza, se hace "una o dos veces al año", según ha afirmado Lavilla.
Adrián Mosquera ha explicado que, aunque "ahora se ha puesto de moda el término", la medicina "siempre es personalizada". Sobre todo en Oncología, porque "no todos los tumores son iguales", sino que la genética influye tanto en sus mutaciones como en la respuesta a los fármacos.
El hematólogo del Clínico compostelano ha diferenciado dos perfiles de pacientes de leucemia linfocítica crónica en la Comunidad: el primer grupo, de edad más avanzada, presenta "mucha comorbilidad" y el objetivo no es tanto la curación sino "el control" de la enfermedad; y un segundo grupo, de personas más jóvenes, entre los 50 y los 70 años, que sí suelen ser candidatos a terapias con fines curativos.
Pero, ¿cómo ha evolucionado en los últimos años la medicina oncohematológica? Más allá del desarrollo de fármacos más dirigidos y personalizados que han contribuido a dejar la quimioterapia para "casos anecdóticos", tal y como ha subrayado Mosquera, el farmacéutico Jaime Gulín ha apuntado la "participación más activa" del propio paciente en la toma de decisiones.
UN ACCESO A FÁRMACOS "EQUITATIVO" EN GALICIA
Aunque el acceso a fármacos es "razonablemente bueno" y "equitativo" en todos los hospitales gallegos, también los comarcales, los tres expertos han puesto el foco en las características de la población en la Comunidad: dispersa, envejecida y, en consecuencia, pluripatológica.
Gulín ha recordado que en las provincias de Lugo y Ourense "un porcentaje cerca del 60%" vive en el rural, por lo que tener un paciente "muy dependiente del hospital es un problema". En muchas ocasiones tienen una renta baja que complica el desplazamiento.
Este farmacéutico del HULA destaca aquí la "colaboración con otros profesionales" --donde también juegan un papel importante las relaciones personales entre ellos-- del sistema sanitario para poder "hacer llegar el tratamiento con los medios que uno dispone".
La doctora Lavilla ha coincidido en la necesidad de "buscar lo mejor" para cada paciente, "también para las familias", con un tratamiento "más adaptado a sus circunstancias de vida".
En esta línea, Gulín ha reflexionado sobre que, en función del contexto y sus condiciones, el doliente "puede aceptar otros objetivos más adaptados a sus circunstancias aunque no sean tan ambiciosos" como erradicar el tumor de manera ágil. "Hay que escapar de la medicina paternalista de decidir por los pacientes. El paciente debe participar claramente en la decisión de tratarse", ha subrayado.
Así, al plantearse la pregunta de si se debe tratar la enfermedad o al enfermo, la jefa de Hematología del HULA tiene claro que "al enfermo, por supuesto". Pero este debe concebirse como un conjunto, es decir, como una persona con un estilo de vida y con unas preferencias. Sobre todo, ha agregado, "si no lo puedes curar" al ser crónico.
ASTRAZENECA, "COMPROMETIDA" CON LA MEDICINA DE PRECISIÓN
Al final del coloquio, la responsable regional de AstraZeneca ha reflexionado sobre el papel de las farmacéuticas en la medicina de precisión. Ana de Mora ha asegurado que su compañía está "comprometida" con este campo de la salud y que trabaja en nuevas terapias, especialmente en aquellas que son "dirigidas".
De Mora ha explicado que Galicia es una "de las tres" comunidades autónomas donde AstraZeneca está desarrollando más investigaciones y a finales de junio se las trasladará en una reunión al nuevo conselleiro de Sanidade, Antonio Gómez Caamaño.
De tal forma, ha recordado líneas de colaboración público-privada en el pasado, como por ejemplo la administración de anticuerpos monoclonales a pacientes inmunodeprimidos durante la pandemia de la covid. Y aquí ha destacado que Galicia fue "la comunidad que mejor lo gestionó".
Así, la responsable regional de la farmacéutica se ha interesado por las necesidades y retos que encuentran los tres expertos en el tratamiento de las enfermedades oncohematológicas crónica, con el objetivo de conocer en qué podría contribuir la industria.
Descartados los cribados, porque "no tienen mucho sentido" para este tipo de patologías salvo en labores de investigación, la doctora Esperanza Lavilla sí ha manifestado la necesidad de "acelerar" las pruebas disponibles para contar con toda la información genética de los pacientes. Asimismo, ha demandado más desarrollo tecnológico y de infraestructuras, así como una "descentralización" de los recursos para facilitar el tratamiento y el control.
Por su parte, el hematólogo Adrián Mosquera ha coincidido con su compañera y ha señalado la necesidad de tener circuitos más especializados y un mejor seguimiento de los pacientes con tecnología para que sean "más autónomos", un campo en el que "hay mucho lugar para la colaboración" con la industria.
También ha mencionado la necesidad de atender a las posibles recaídas de la enfermedad y de realizar "más ensayos clínicos". Sobre estos últimos, el farmacéutico Jaime Gulín ha sugerido "tener mejor definidos" los repositorios no solo en Galicia, sino en todo el Estado.