Santiago, la ciudad gallega más complicada para aparcar

Santiago, la ciudad gallega más complicada para aparcar

Aparcar en Santiago de Compostela es cada vez más complicado. Según datos de Parclick, la aplicación líder en reserva de parkings online, la capital gallega se encuentra entre las diez ciudades españolas donde estacionar supone un auténtico desafío. La creciente demanda de plazas de aparcamiento, sumada a las restricciones de tráfico y la reordenación del espacio urbano, ha generado un escenario en el que planificar con antelación se ha vuelto imprescindible para los conductores.

 

 

A nivel nacional, Barcelona lidera el ranking de las ciudades más complicadas para aparcar, seguida de Madrid, Sevilla, Valencia y Granada. Santiago de Compostela ocupa también un puesto relevante en esta lista, situándose entre las urbes donde los conductores se ven obligados a dar más vueltas en busca de un hueco libre. La falta de estacionamientos en la vía pública y el aumento del turismo han contribuido a la saturación del tráfico en el casco histórico y las zonas aledañas.

 

Planificar con antelación, la clave para evitar problemas

Las restricciones de circulación y el crecimiento del parque automovilístico han llevado a los compostelanos y visitantes a optar por soluciones alternativas, como los parkings de reserva online o los estacionamientos disuasorios. La recomendación principal para evitar perder tiempo y dinero es anticipar la búsqueda de aparcamiento, ya sea a través de plataformas digitales o eligiendo zonas con mejor acceso al transporte público.

 

 

 

 

Además, los horarios de mayor afluencia, entre las 8:00 y las 10:00 de la mañana y entre las 18:00 y las 20:00 de la tarde, agravan la dificultad para encontrar un sitio libre. Evitar estas franjas horarias y comparar precios entre distintos aparcamientos se ha convertido en una estrategia clave para los conductores.

 

En definitiva, la movilidad en Santiago de Compostela sigue siendo un reto para residentes y visitantes. En un contexto en el que la oferta de aparcamiento es cada vez más limitada, la mejor opción sigue siendo planificar con antelación, evitar horarios punta y apostar por soluciones digitales que faciliten la búsqueda de estacionamiento en una ciudad donde cada metro cuadrado cuenta.

Santiago, la ciudad gallega más complicada para aparcar

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