El Gobierno de Santiago de Compostela ha presentado una serie de alegaciones al trazado modificado de la senda entre el Milladoiro y la Estación Intermodal en las que piden a la Xunta que deje sin ejecutar el tramo de la senda peatonal y ciclable entre San Caetano y O Milladoiro, que afecta al bosque del Banquete de Conxo.

En su defecto, reclaman que se opte por un trazado que se apoye en la conexión ya prevista con el Complejo Hospitalario Universitario de Santiago (CHUS) y cruza el núcleo de Conxo.

El Gobierno compostelano ha presentado estas alegaciones en un momento en el que la Consellería de Infraestructuras estudia alternativas al cuestionado trazado y cuyas obras estaban siendo investigadas por el juzgado nº2 de Santiago de Compostela y la Fiscalía anticorrupción europea tras denuncias de grupos ecologistas y asociaciones vecinales.

En rueda de prensa, los concejales del Gobierno de la capital gallega María Rozas e Iago Lestegás han puesto en duda además los criterios de evaluación empleados por la Xunta y su ponderación, destacando el escaso peso que se le da al impacto ambiental y cultural.

A juicio del Ejecutivo local, el proyecto previsto por la Xunta inicialmente es incompatible con el proyecto Ecobosque, ya que las obras “se basan, precisamente, en que la actuación le afecta al mismo ámbito en el que se pretende la recuperación ambiental del ecosistema fluvial del río Sar, siendo proyectos incompatibles financiados ambos con fondos europeos”.

En este sentido, se apunta que “los movimientos de tierras asociados a la construcción del itinerario van totalmente en contra de los principios aplicados en el Ecobosque” mientras que la utilización de maquinaria pesada para las obras de la senda pone en riesgo la diversidad faunística que se busca proteger.

Según el Gobierno local, el trazado alternativo de la senda obligaría a talar más de 40 robles y afectaría a muchos árboles identificados en el inventario del Ecobosque.

Por otro lado, el Ayuntamiento también destaca el incremento de los riesgos de inundaciones que la actuación autonómica podría provocar entre los puentes de Suarribas y Pereda, así como la afición al túnel de la antigua línea de ferrocarril Cornes-Carril.