El Ayuntamiento de Santiago de Compostela y la Xunta de Galicia llegaron ayer, después de meses de duras negociaciones, a un acuerdo que establece las condiciones para su colaboración en la construcción del tan demandado aparcamiento del Clínico.

El pacto incluye la creación de un parking, en altura y soterrado, y la mejora de la accesibilidad en las inmediaciones del CHUS a través de un plan de interés autonómico (PIA) con un perímetro consensuado entre las dos administraciones, lo que se ajusta a las exigencias de ambas partes.

En el trato se establece, asimismo, que será el Ejecutivo autonómico quien aporte el 90% del coste de las obras, lo que supone una rebaja en las pretensiones de la Administración local, que exigía hace meses que financiasen el 100%. Por otro lado, Raxoi ha accedido a regular la ordenanza fiscal correspondiente a la exención del pago del IBI del Hospital. 

Además, el convenio fijado marca el compromiso de la Xunta para cofinanciar actuaciones de saneamiento y abastecimiento para el rural compostelano, algo que la Adminsitración gallega ya había planteado en las últimas reuniones. En total, destinarán 3,5 millones de euros a este fin.

El parking

La previsión es que el nuevo aparcamiento del Complejo Hospitalario Universitario de Santiago de Compostela cuente, en cuanto finalicen las actuaciones, con unas mil nuevas plazas de estacionamiento en su entorno.

De esta manera, ambos entes podrán dar respuesta a las demandas tanto de los santiagueses como de los propios trabajadores del Clínico. Con relación a ello, las dos partes han manifestado la satisfacción que les inspira esta reordenación del espacio, sobre todo por lo conflictivo que ha sido. Como declaró la alcaldesa, Goretti Sanmartín, “é un bo día para os veciños".