El próximo martes 22 de abril, la plantilla del concesionario Yáñez en Santiago de Compostela secundará una jornada de huelga convocada por la CIG-Industria. La protesta responde a la incertidumbre que arrastra el personal desde que la empresa, concesionaria oficial de Volkswagen, se acogiera al preconcurso de acreedores en diciembre del año pasado.

La jornada incluirá una concentración a las 12:00 horas ante el concesionario situado en el barrio de Fontiñas. Aunque trabajadores de los centros de A Coruña y Ferrol también participarán, la movilización en Compostela cobra protagonismo por la continuidad de la actividad en sus instalaciones, frente al parón casi total en otros puntos de la provincia.

Salarios sin garantías y sin explicaciones

El pasado miércoles, la empresa ingresó de forma inesperada solo la mitad de la nómina de marzo, sin ofrecer ninguna explicación ni indicar cuándo se abonará el resto. Tampoco existen garantías sobre el cobro de los próximos sueldos.

Desde el sindicato denuncian la falta de información oficial por parte del administrador del preconcurso, quien no ofreció datos hasta principios de abril. En su visita al centro compostelano, trasladó la intención de aplicar un ERE que podría afectar hasta al 50 % de la plantilla, y reconoció que la empresa no contaba con liquidez suficiente para hacer frente a las nóminas. También se cuantificó la deuda de Yáñez en unos siete millones de euros.

En Compostela, trabajo con inquietud

A diferencia de los talleres de Ferrol y A Coruña, donde la actividad se ha visto muy reducida por falta de material y piezas, en Santiago se sigue trabajando con relativa normalidad. Aun así, la preocupación entre el personal es creciente.

“Queremos saber qué va a pasar y si vamos a cobrar”, señalan desde la plantilla, que teme que esta situación se prolongue sin solución.

La huelga del martes busca precisamente eso: respuestas claras, garantías de cobro y un plan de viabilidad que evite la desaparición de una empresa con décadas de presencia en la ciudad. Desde la CIG-Industria no descartan nuevas movilizaciones si la situación no mejora en los próximos días.