La Dirección Xeral de Calidade Ambiental de la Xunta ha emitido una declaración de impacto ambiental favorable al proyecto de instalación de una planta de fundición de chatarra de aluminio promovido por Aluminios Cortizo en el parque empresarial de Pedra Partida, en el municipio coruñés de Coirós.

El nuevo proyecto de Cortizo se llevará a cabo dentro de unas instalaciones ya existentes, dedicadas actualmente a la gestión de residuos no peligrosos. Según la documentación presentada, la actuación implicará una serie de modificaciones en el proceso industrial, motivo por el cual ha sido sometida al procedimiento de autorización ambiental integrada, incluyendo también una evaluación de impacto ambiental ordinaria.

Un proyecto condicionado al cumplimiento ambiental

La Xunta concluye que el plan es ambientalmente viable, siempre y cuando se respeten las condiciones impuestas, así como el programa de vigilancia ambiental y las medidas recogidas tanto en el estudio de impacto como en el resto de la documentación evaluada.

La futura planta se ubicará en una parcela de más de 100.000 metros cuadrados, donde ya existen dos naves industriales, edificios auxiliares, dos explanadas exteriores pavimentadas, aparcamientos, zonas verdes y accesos acondicionados.

Con esta nueva planta, Aluminios Cortizo refuerza su presencia industrial en Galicia, en un contexto de apuesta por la economía circular y el reciclaje de materiales como el aluminio.