Santiago despierta hoy con la triste noticia del fallecimiento de Ángel Iglesias, el que fuera durante años gerente del mítico bar Black Ball ubicado en la calle Fernando III.
Es un día gris tanto para la hostelería compostelana como para los amantes del pull.
El establecimiento ubicado al lado del gimnasio Espagat era lugar de culto para expertos y aficionados a los juegos de bar, puesto que el local cuenta con mesas de billar y dianas profesionales.
Ángel será recordado por su sentido del humor y la cercanía de su trato, características que suponían uno de los principales atractivos del establecimiento que regentaba.