La alcaldesa de Santiago, Goretti Sanmartín, ha cargado este viernes contra el Partido Popular por lo que calificó como una “tremenda irresponsabilidade” al votar en contra del pago de cerca de tres millones de euros en facturas pendientes por servicios de autobús urbano. En la misma línea, ha censurado la abstención de los concejales no adscritos, anteriormente expulsados del PSOE, al considerar que eran plenamente conscientes de las consecuencias de su decisión.
El bloqueo tuvo lugar en el pleno municipal celebrado este jueves, donde la corporación desestimó el pago de dos facturas por servicios de transporte prestados por las empresas Autocares Rías Baixas y TRALUSA, esta última responsable de la mayoría de las líneas urbanas de Compostela. La suma de las deudas asciende a 2.939.818 euros: 402.093 euros a Rías Baixas y 2.537.725 euros a TRALUSA. Esta es, además, la segunda vez que se rechaza una factura correspondiente a esta última empresa.
Sanmartín insistió en que las facturas “hai que pagalas”, ya que se trata de servicios ya realizados, y alertó del precedente preocupante que supone que el pleno municipal pueda bloquear este tipo de expedientes por motivos políticos. En sus palabras, ni las empresas, “nin os traballadores, nin as súas familias” entienden esta decisión.
La alcaldesa ha recriminado a los concejales no adscritos que, pese a haber recibido toda la información del expediente y haberse celebrado las reuniones solicitadas, finalmente no votaran a favor. Recordó que expedientes similares fueron presentados en pleno durante el anterior mandato por el propio Gonzalo Muíños, entonces en el gobierno municipal.
Durante su comparecencia ante los medios este viernes, Sanmartín vinculó estas posiciones al “interese do PP en que todo vaia mal” y a los problemas internos de los ediles no adscritos.
La regidora defendió la actuación del gobierno local para mantener el servicio, las frecuencias y las líneas, a pesar de la precariedad del contrato, y explicó que ahora las empresas deberán recurrir a otras vías para reclamar el pago de las facturas.
Sobre la advertencia del portavoz popular, Borja Verea, de llevar la documentación del expediente a órganos de anticorrupción y responsabilidad contable, Sanmartín respondió con contundencia: “É difícil de dixerir que un partido condenado por corrupción veña falar de corrupción”.
Finalmente, hizo un llamamiento a la “responsabilidade política” y pidió que el pleno no se convierta en una herramienta de desgaste del gobierno, sino en un espacio para debatir y decidir sobre los intereses reales de la ciudadanía compostelana.