El paso de la borrasca Kirk, anteriormente huracán, ha dejado a su paso un rastro de problemas en Santiago de Compostela, causando la caída de árboles, desprendimientos de muros, cortes de calles y afectando a varios edificios. Entre los daños más importantes se encuentra el levantamiento de parte del tejado del Conservatorio de la ciudad.
Según informó este miércoles el concejal de Movilidad y Convivencia, Xan Duro, durante una rueda de prensa, el servicio de bomberos se ha visto desbordado durante la madrugada y la mañana, registrando un total de 53 intervenciones entre las 02.00 y las 11.00 horas. De estas salidas, 45 estuvieron relacionadas con la caída de árboles y ramas, mientras que también se atendieron incidencias por saneamiento de fachadas, inundaciones y la caída de carteles.
A pesar de los esfuerzos de los bomberos, al mediodía todavía quedaban 42 incidencias pendientes, ya que, según explicó el representante de Raxoi, se tuvo que priorizar las más urgentes debido a la gran cantidad de actuaciones requeridas. Dos de las principales vías afectadas por la caída de árboles fueron la rotonda de Vidán y la avenida de Lugo, donde se produjeron cortes de tráfico. Además, varias líneas de autobús, como la 5, 6, 6A y las circulares, experimentaron interrupciones y retrasos, aunque algunas ya estaban retoman la normalidad.
Entre los puntos más perjudicados, destacan el Conservatorio, donde el viento arrancó parte del tejado, y el colegio de Fontiñas, que sufrió la caída de un árbol. También se reportaron daños en el Campus Sur de la USC, en una empresa del polígono de Costa Vella y en el Centro Sociocultural de A Trisca.
La borrasca Kirk también dejó a 400 luminarias sin suministro eléctrico, debido a los daños sufridos por los postes, lo que ocasionó cortes de luz en diferentes puntos de la ciudad. Aunque las labores de reparación avanzan, Duro aseguró que "la normalidad se irá recuperando" paulatinamente.
Finalmente, el concejal alertó sobre inundaciones y acumulaciones de agua en las carreteras, así como un pequeño desbordamiento en Brañas do Sar, donde se ha activado el nivel de prealerta para evitar incidentes mayores. Las autoridades locales continúan trabajando para restablecer los servicios y garantizar la seguridad de la ciudadanía tras el paso de la tormenta.
Durante la noche pasada, el viento y la lluvia azotaron Santiago de Compostela, con registros que superaron los 60 km/h en el Campus Sur, según datos proporcionados por el Observatorio Astronómico Ramón María Aller de la USC. El momento más intenso se produjo a las 07.38 de la mañana, cuando las ráfagas alcanzaron los 71,6 km/h.
Además de los fuertes vientos, las lluvias fueron abundantes, acumulando un total de 73,9 litros por metro cuadrado entre las 20.00 horas de ayer y las 10.00 de hoy. En otras áreas del municipio, las ráfagas de viento pudieron llegar hasta los 114 km/h, lo que refleja la magnitud del temporal que afectó a la zona.