A falta de poco más de una semana para el inicio de la Semana Santa, los hoteles de la Unión Hotelera Compostela (UHC) registran una media de reservas del 70%. Sin embargo, el sector confía en un repunte de última hora que podría llevar la ocupación hasta el 80%, siempre y cuando el tiempo juegue a favor.
"Sabemos que subirá, pero esta no es la mejor época para la hotelería en Santiago", explica José Antonio Liñares, portavoz de UHC. La razón principal es que la ciudad, aunque mantiene su atractivo turístico constante, en estas fechas no recibe el empuje de congresos, viajes de negocios o turismo internacional que sí experimenta en otros meses. "Las reservas de Semana Santa dependen en gran medida de las condiciones meteorológicas, porque la mayoría de visitantes nacionales decide su destino en el último momento", añade Liñares.
Según los hoteleros, las reservas experimentarán un aumento significativo de miércoles a domingo, pero con un inicio de semana flojo. "Eso hace que la media baje, pero los días centrales sí se nota un buen nivel de ocupación", destaca el portavoz de UHC.
A pesar de que las cifras de ocupación no sean las más elevadas del año, la tarifa media por noche ha registrado un incremento. "Los precios esos días son altos, y eso ayuda a compensar un poco el descenso de la demanda en comparación con otros periodos del año", afirma Liñares.
Los datos de años anteriores confirman esta tendencia: mientras que en mayo de 2024 la media de ocupación alcanzó el 93%, la Semana Santa suele quedar por debajo de ese umbral. "Comparados con otras ciudades, Santiago no alcanza los mismos niveles de reservas en estas fechas", reconoce el representante de los hoteleros.
Con la Semana Santa cayendo este año a mediados de abril, el sector se mantiene expectante ante el impacto que pueda tener la previsión meteorológica. "Si hay buen tiempo, podemos ver un incremento de hasta un 10% en la ocupación de última hora", apunta Liñares.