La ciencia compostelana vuelve a situarse en el mapa internacional gracias al equipo liderado por la investigadora Aurora Gómez Durán en el Centro Singular de Investigación en Medicina Molecular y Enfermedades Crónicas (CiMUS) de la Universidade de Santiago de Compostela (USC). Su último trabajo, publicado en la prestigiosa revista Nature Communications, revela que ciertas mutaciones ocultas en el ADN mitocondrial están directamente relacionadas con el envejecimiento y que su avance puede ralentizarse con restricción calórica.
El estudio se enmarca en una colaboración internacional cofinanciada con fondos europeos y centrada en las llamadas mutaciones crípticas mitocondriales: alteraciones raras y difíciles de detectar que se acumulan en células que ya no se dividen. Según explica la doctora Gómez, “estas mutaciones logran esquivar los mecanismos naturales de defensa del organismo y se acumulan con la edad, provocando estrés celular y problemas en el plegamiento de proteínas”.
La investigación también confirma la relación directa entre estas mutaciones y el deterioro neurológico. En los experimentos realizados, las células cerebrales con altos niveles de mutaciones crípticas mostraban síntomas de neurodegeneración, un dato clave para avanzar en el conocimiento de enfermedades como el Alzhéimer o el Parkinson.
Además, el estudio aporta un dato esperanzador: la restricción calórica, conocida por sus efectos beneficiosos para la longevidad, también frena la acumulación de estas mutaciones mitocondriales.
Este hallazgo refuerza la apuesta del CiMUS por una ciencia de impacto real. El centro compostelano trabaja en una medicina traslacional que conecte el laboratorio con la clínica, orientada a resolver los grandes retos en salud pública. Tal y como subraya Aurora Gómez, “este avance no solo mejora nuestra comprensión del envejecimiento, sino que abre puertas para abordajes terapéuticos más precisos y personalizados”.
Con este estudio, el CiMUS refuerza su liderazgo en el ámbito de la investigación biomédica, apoyado por el reconocimiento como Centro de Investigación Galego Universitario Singular (CIGUS), su colaboración con instituciones internacionales y su firme compromiso con la salud de la ciudadanía.